Hoy tu ángel te dice: Llegada de un triunfo

Hoy tu ángel te dice:

Yo soy el ángel que vuela dulcemente a tu alrededor para anunciarte la llegada de un triunfo, sueltate…. entregate… ¡Es fácil ascender ayudado por mis alas! Respira profundamente… Viene un tiempo de paciencia y constancia.

Este es un momento donde tal vez sería una buena idea hacer recuento de cuáles son aquellas obligaciones, o aquellos deberes a los que tienes que hacer frente en tu cotidianidad, en tu trabajo, en tu vida personal o incluso en tus relaciones, y es necesario hacer especial hincapié en que cuanto más positiva sea tu mente con respecto a esos deberes y obligaciones, más fácil será el abordarlos y por ende más fácil aun el alcanzar los objetivos satisfactoriamente. Ser consciente también de cuáles son tus propias expectativas con respecto a tus objetivos, es lo que te permitirá definir unas estrategias cuidadosamente desarrolladas y que a la par, te permitirán cumplir con constancia y perseverancia, pero sobre todo paciencia, cada paso que hayas estipulado en cada tramo del camino y ello indefectiblemente te llevará a alcanzar tus propios objetivos.

Si te marcas objetivos de largo plazo y eres constante, perseverante, paciente y no te ves asfixiado por la necesidad imperiosa de conseguirlo, ya te vas a dar cuenta de que cuando alcances tu meta durante todo el trayecto habrás ido consiguiendo pequeños objetivos que te van a dar grandes alegrías, y cuando consigas tu objetivo final, la sensación de satisfacción será tan inmensa que ahora mismo ni tú eres capaz de imaginarlo, es por eso que debes darte la oportunidad de transitar por ese camino de tener confianza y seguridad en ti mismo, de que eres capaz de alcanzar tus propios objetivos y que tan solo necesitas planificar un poco, seguir al pie de la letra tus propias planificaciones, con constancia y perseverancia y esos buenos tiempos que estás anhelando llegarán antes de lo que te piensas.

El decreto que te traen tus ángeles para el dia de hoy es:

Mi conciencia destila amor y pensamientos positivos, y ello se refleja en mis actos. Vivo sabiendo que estoy a salvo y divinamente guiado y protegido.